lunes, 30 de enero de 2012

Nuestro finde (según mi cámara)

Este finde fue atípico por sus altibajos: el viernes se fué para siempre Carmen, la abuela de Mariano, y por supuesto (aunque ya hacía tiempo que no estaba bien), fue un evento triste. Pero el sábado también cenamos con amigos, compartimos con Gaby y Fede nuestras experiencias como padres primerizos y la pasamos súper bien. El domingo nos enteramos de que los padris Nano y Miguel habían logrado la adopción de dos perritos (que la habían pasado muy mal) del refugio "El Campito", y su familia y sus corazones se agrandaron. Limpié a fondo nuestro "lavadero guarda tutti" y tiré muchas cosas, en busca de un pequeño espacio privado para mí. Tuvimos una tarde de paseo de shopping (escapando del calor) y a la noche cenamos mega-hamburguesas con mi hermana y mi cuñado. Es así la cosa, nomás... cuestión de tratar de compensar, no?











Y para empezar el lunes, nada mejor que una buena cara de vizcacha!


Fotos Gaby Morales


viernes, 27 de enero de 2012

Cambalache vintage

Hace poco, Amadeo y yo acompañamos a Mariano a la facu, en San Telmo, y no perdí oportunidad para arrojarme a una de mis pasiones: la ropa vintage. Varias veces había pasado por el local de las chicas de Cambalache Vintage pero por un motivo u otro (a veces era tarde y estaba cerrado), nunca había podido entrar. Per esta vez... Oh, esta vez entré! Y encontré un negocio lleno de tesoros: No sólo vestidos, sacos, carteras... también botones, bijou y sombreros. También son la opción ideal para buscar vestuario para teatro. Además, Marilyn me dejó probarme y revolver todo sin ninguna prisa. Así que estuve buscando eso que siempre me llama a través de alguna prenda y lo encontré en un vestido increíble que estrené en la nochebuena. Fue la segunda navidad de Amadeo (en la primera tenía sólo un mes de vida!), y ahora que es ya casi un niñito, quería que fuera memorable. El vestido, junto a la compañía y el amor que nos rodeó esa noche, fué parte del conjuro para detener el tiempo en mi recuerdo.
Si andan por San Telmo, pasen a ver: siempre hay algo para cada uno a excelentes precios. Están en Humberto 1º  817 /821. Las chicas tienen un grupo, homónimo, en Facebook y también un blog con looks muy interesantes armados con ropa del local.










Fotos Gaby Morales y Mariano Nesi

Por si se los perdieron, les dejo algunos posts anteriores sobre moda y ropa vintage:

100 años de moda en 2 minutos

jueves, 26 de enero de 2012

Una beba rockstar y todo terreno!


Los padres de Yael ya habían recorrido buena parte del mundo antes de su llegada y decidieron que con su beba a cuestas, las aventuras iban a seguir. Sus amigos les dijeron que entre los seis meses y el año era su oportunidad de llevarla a cualquier lado sin problemas, porque al no caminar todavía, era como llevar una mochila más; Frente a la mirada desaprobatoria y procupada de sus cuatro abuelos, Yael partió con sus papás a recorrer cada pequeño pueblito del Sudeste Asiático que pudieron.
 Durante todo el viaje, Yael desaparecía repentinamente de los brazos de sus papás: si iban a un restaurant, la moza se la llevaba a los besos para mostrársela a toda la cocina; si iban en una lancha cruzando un río, los pasajeros se la pasaban de brazos en brazos hasta llegar al capitán, que quería comerle los cachetes; Si iban a un mercado callejero, los vendedores le regalaban frutas para que comiera; Los policías chinos (esos que en las películas dan miedo), se desarmaban haciéndole morisquetas para que se riera...como si fuera una estrella de rock aclamada por sus fans!  Y nada tenían que ver sus ricitos cobrizos o sus ojos azules: sus padres se dieron cuenta de que estaban en una cultura que simplemente adora a los bebés y tan lejana a su propia idiosincracia de temerle a todo (y a todos), se relajaron.



Reflexionaron sobre cómo le tenemos miedo a todo: a los extraños, a los gérmenes, a las comidas exóticas, a los viajes... y descubrieron que su beba nunca corrió ningún peligro y siempre estuvo bien (sólo se hizo adicta a cada rara fruta asiática que probó).


Salvando las (graaandes) distancias, me identifico con este artículo y con estos papás. Cuando viajamos con Amadeo, siempre alguien me pregunta "Y no tenés miedo de ir tan lejos con el nene tan chiquito?" La verdad, si, me da miedo y creo que eso va a ser siempre inevitable, pero no quiero que el miedo me paralice, y sobre todo, no quiero enseñarle eso a mi hijo. Quiero enseñarle a ser un explorador, quiero enseñarle a descubrir cosas nuevas todo el tiempo, quiero enseñarle a ser prudente pero sin miedos, sobre todos los míos. Quiero que sepa que el mundo nos está esperando... aunque ya esté a punto de caminar y no sea "una mochila más" :)

Vía The New York Times

Les dejo algunos posts pasados por si se los perdieron, pasen a chusmear!:

Algunas cuestiones que Amadeo debería saber sobre su verdadero padre...

Tatoo

miércoles, 25 de enero de 2012

Bitácora de viaje: Brooklyn

Brooklyn fué una de mis partes favoritas de nuestro viaje a New York. Anhelaba caminar por sus callecitas y por supuesto, atravesar su puente. Si bien tiene fama (infundada) de tener barrios peligrosos (sería como nuestro "conurbano" jaja), nos encontramos con edificios antiguos y románticos, veredas arboladas y casas con frentes de películas, negocios de objetos de diseño por doquier, un ambiente bohemio-chic en el aire y una vista magnífica de Manhattan... sin olvidar, claro, mi tan amado Carrousel. Pasen a ver!



















Yo inmortalicé a Amadeo y Mariano...

Hizo un Corazón con la "S" de Solano! Éso es lo que llamo ser Solanense por adopción! :)







Por si no las vieron, acá van otras vitácoras de nuestro viaje:

En busca del Cheesecake perfecto!

Tocino, hotcakes, pepperoni y pastrami!!!





Fotos Gabriela Morales