jueves, 29 de diciembre de 2011

Hice cupcakes!!!


Si, me salieron! Mi problema con la repostería (y con la vida en general) es que no me gusta medir nada, de alguna manera creo que puedo hacer todo "a ojo". Otro problemita es que no me gusta limpiar el desorden que queda en la cocina... Para resolver el primero, descubrí algunos tips que paso a contarles, y para el segundo... escucho sugerencias (vale dinamitar todo?)

La masa:
Es tan simple como esto: bizcochuelo de cajita. Se prepara según las instrucciones (batir tres huevos y veinte cucharadas de leche. Después agregar la mezcla) y se le puede agregar pedacitos de fruta, chocolate, etc... yo me quedé con la receta simplona ya que era mi primera vez: quise ir a lo seguro pero la próxima ya empiezo a experimentar. Salieron aproximadamente veinte.
Como yo no tengo moldes especiales para cupcakes (te odio, maldita Paula y a todos tus moldes y tuppers originales!), usé doble pirotines para que cada cupcake no perdiera su forma. Se cubre un tercio con relleno y están listos en  quince o veinte minutos de horno medio. Ni los pirotines ni la asadera necesitan enmantecado previo.


Para la decaoración usé glaceado. Se prepara batiendo dos claras de huevo y agregando azúcar impalpable. Con mi experiencia de trabajar a ojo aprendí que mientras más azúcar usás, más firme queda el glacé y endurece más rápido. A una mitad le agregué colorante (todo se compra en el cotillón y es súper económico) para que la cobertura fuera roja y blanca; preparé los cupcakes en honor al cumple nº 59 de mi papá, que es de river... por eso no quise sobrecargar la decoración, pero a los próximos, les van a salir arcoiris por todos lados, jaja.
Quienes los probaron dijeron que estaban riquísimos y a mi también me gustaron... está buenísimo esto de hacer cupcakes porque al fin y al cabo, no son más que magdalenas súper tuneadas!

Fotos Gaby Morales

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