Creo que todas las relaciones humanas, si no se alimentan positivamente, se desgastan. Y la amistad no es una excepción... a veces soportamos desplantes, desanteciones, desconsideraciones y justificamos a esa persona simplemente porque la queremos (que te dejen plantada con el té y los bizcochitos no parece tan grave, después de todo). Pero a lo largo de los años, la cuestión se empiza a agrietar...y a veces no poder compartir un momento alegre, feliz, daña tanto como no poder contar con esa persona en los momentos difíciles, tristes. A veces, una persona avanza, evoluciona... y la otra se va quedando siempre en el mismo lugar, estancada; entonces no hay lugar posible para el encuentro. A veces, para sostener una amistad que ya no se siente tanto como tal, nos aferramos a recuerdos, a otro momento de nuestras vidas vivido juntos... en el pasado, cuando tuve estas sensaciones, me fue muy fácil cortar con la gente que ya no aportaba una presencia positiva en mi vida, aunque me arrepiento un poco de no haber sido un tanto más suave o moderada con mis palabras... entonces ahora, me pregunto si vale siquiera la pena poner en plabras el porque de mi partida, de hecho me pregunto si vale la pena siquiera decir adiós o hasta luego...
Me encantaría saber... alguna vez tuvieron que poner fin a una amistad, particularmente larga? Cómo les fue?
Foto 123RF.com (archivo de imágenes)
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