lunes, 13 de enero de 2014

Nuestro finde de parques,picnics y pancitas revueltas (según mi cámara)

Primero lo primero: un retrato de mis hijos una vez por semana, todas las semanas



El sábado aprovechamos el alivio de esa brisa fresquita para ir al Parque Pereyra en familia a hacer un almuerzo tardío (hasta que todos terminamos nuestras cosas y llegamos, eran casi las tres de la tarde!), pero lo genial fue que tuvimos el parque casi para nosotros solos! Un domingo al mediodía es otra historia, pero como alguien dijo "hagamos de cuenta que estamos en el patio de nuestra mansión" jaja y así lo hicimos... Perkins, tráiganos una copa de limonada, por favor!

Bienvenidos a nuestra humilde morada de fin de semana...




Para Gaspar, menú especial
y para el resto, hamburguesas!
Nada detiene a un buen ... parrillero? planchero? ni la falta de utensillos, para eso está la naturaleza!
Mi hermana y mi cuñado aprovecharon para sacar al aire libre a sus hijos, que son gatos de departamento!

Como buenos padres, le llevaron alimento a sus bebés!



Paula, mi cuñada, se hizo un tratamiento con botox en... el pelo! Y le quedó divino! Me voy a copiar! (siempre y cuando no me lo pongan en la cara!)
Amadeo y mi papá descubrieron que un viejo molino sigue alimentando al tractor sisterna que le da agua a los animales del parque
A mi papá le encanta charlar y como es muy curioso, empieza conversación con cualquiera sin problemas. Así charlamos un poco con unguardaparque y aprendimos un poco más sobre cómo mantienen al parque... creo que mi ninja más grande y yo heredamos la sociabilidad de él!

Amadeo y los sanguchitos, un sólo corazón...





Obviamente no faltaron las acrobacias en el pasto con Mariano...


Ni las competencias a ver quién tiraba la pelota más alto!
Yo practiqué mi deporte favorito: la hamaca (hey, después de un rato de hamacarme, me dolían las piernas, así que por ende cuenta como deporte!)

Con Bel llegamos tan alto que nos mareamos! jaja!






Quién se anima a bajarse de un salto? jaja!

Gaspar, siesteando de brazo en brazo...

Nos cruzamos con dos perritos Jack Russell hiperactivos y muy graciosos!



Llega un momento de la tarde en el que hay que entregarse a la siesta o a la fiaca, no?







Como la casona estaba cerrada (nunca pudimos entrar a hacer la visita guiada!), nos dedicamos a espiar por todas las ventanas, pero no pudimos ver mucho... malditas cortinas!



Entre telas de arañas, bel encontró un viejo llamador y tocó la puerta... yo, que las pocas películas de terror que ví en mi vida me sirvieron para saber que eso no se hace, tenía ganas de salir corriendo! jaja!
Y el domingo, después de haber pasado una tarde tan linda, Amadeo amaneció con fiebre y la pancita revuelta. Nos quedamos todo el día encerrados para cuidarlo, y entre el malestar, el día nos hizo un regalo maravilloso: una siesta de a cuatro, de esas con ls que soñábamos cuando éramos dos, cuando éramos tres... y vaya si nos vino bien a todos! Amadeo hoy está mucho mejor, listo para más parques y más... siestas!

Fotos Gaby Morales

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