Nuestro finde XL en Villa Santa Mónica (según mi cámara)

El jueves a la mañana llegamos a Córdoba, y aunque habíamos reservado una cabaña en "El Durazno" (el pueblito donde desde hace aaaños estamos construyendo una casa), nos encontramos que el lugar era casi inaccesible con vehículo que no fuera 4x4, la bomba de agua estaba rota y los paneles de energía solar no funcionaban, o sea que íbamos a estar a oscuras... así que nos despedimos de la hermosa beba que nos recibió (Amadeo estaba súper enternecido y lo tomé como un buen augurio para la llegada de su hermano) y partimos a buscar otro lugar donde hospedarnos.

Recorrimos El Durazno y otro pueblo cercano, Yacanto, en busca de cabañas y todo todo ya estaba alquilado. Así que sugerí el próximo poblado, Villa Santa Mónica, pegadito a Santa Rosa de Calamuchita, y conseguimos una cabañita adorable que estaba reservada pero quienes la habían alquilado no habían podido viajar... si, era para nosotros! Después de 12 horas de viaje más búsqueda de hospedaje, ya me estaba desesperando y con mi panzota, estaba muy incómoda, pero cuando vi la pileta que nos esperaba... respiré aliviada!

Amadeo y yo tuvimos mucho tiempo para relax y para conectarnos con su hermanito, que ya tiene nombre! (lo cuento o no lo cuento? jeje!)

Después de tanto tiempo, juntar plata de a poquito y trabajo de hormiga, nuestra casita cordobesa ya tomó forma...todavía queda mucho por hacer y seguirá siendo un proyecto a largo plazo, pero me tiene más entusiasmada que antes! Y nos dimos cuenta de que es enorme! Es que... de qué sirve una casa de vacaciones si no está pensada para llenarla de familiares y amigos?

Nuestra calle... tenemos poquitos vecinos! jaja

Pero tenemos un jardín de flores silvestres increíble!

No sé si fué el aire de las sierras pero Amadeo retomó su amor por las manzanas! Me parece a mí o por acá está cada vez más difícil conseguir fruta rica? Estas manzanas parecían de caramelo!

Ayudando a papá a lavar los platos: el abuelo sólo se puso para la foto! Me quedo con los hombres modernos, que entienden que los queaceres de la casa son una responsabilidad de todos!

Abueleando en el río...

Aunque pasaron tres días juntos, las horas no parecían alcanzarles a este dúo para andar de aventuras...

Recorrimos un pueblito antiguo llamado "Los Reartes"

Su iglesia fue construída en 1758! Nos transportó en el tiempo... también tiene un río precioso lleno de playitas ideales para chicos.

Una antigua pulpería, de verdad...

Y aprovechamos el paseo de artesanos para llevarle un regalito a mi hermana, que nos hizo el favor de darle de comer y cuidar a nuestras mascotas. Creo que lo más lindo de este viajecito, fué descubrir que mi panzota ya se hace sentir y me exige más cuidado y tranquilidad... y también que la próxima vez que volvamos a ver nuestra casita cordobesa, Gaspar va a estar entre nosotros! Ups, se me escapó!!! ;)

Fotos Gaby morales