Nuestro comienzo de 2013 en las sierras

Igual que el año pasado, empezamos este 2013 en el medio de las sierras cordobesas de El Durazno, Valle de Calamuchita, donde (si todos los astros se alinean... alíniense por favor!!!) este año vamos a tener lista nuestra casita de veraneo. Es un lugar que nos encanta porque, aunque todo sea muy rústico, conserva su encanto natural, sin cables a la vista ni cañerías, y el no tener energía eléctrica ni gas natural se paga a fuerza de relax total y desconexión del mundo... a veces eso es precisamente lo que necesitamos.

También como el año pasado, nos acompañaron Vero y Mateo, familia pero sobre todo amigos, y no le escapamos a la pequeña tradición que ya lleva dos años, de usar una bajísima velocidad de obturación de la cámara (por suerte Vero tiene una súper cámara más nueva que la mía y por supuesto, sana... se me pianta un lagrimón!) y pudimos jugar a escribir en la oscuridad de la noche del campo con un tubo de luz de emergencia.

El río El Durazno tiene ollas profundas, trampolines naturales de piedra pero también alguna que otra playita ideal para ir con chicos... el último día de nuestra estadía, el dueño del camping que linda con esta costa del río alquilaba kayaks para que la gente navegara entre las familias que pasaban una tarde tranquila en el agua... obviamente, gente del lugar y yo nos opusimos y lo expresamos: hay lugar para todo y para todos, pero los emprendimientos comerciales y privados no tienen por qué invadir los pocos espacios públicos que quedan... nota graciosoa: mientras yo discutía con los dueños de los kayaks, Amadeo despacito y por detrás iba y venía del río con su baldecito mojándoles los toallones y la ropa: así se hace, hijo mío! jaja

Con Vero. Como mamás que trabajan, se nos complica encontrar momentos para charlar, así que al menos una vez al año nos tomamos unos días para ponernos al día!

Mateo está enorme, pero lo que más me gusta de verlo crecer, es verlo tan racional, tan sensato y sobre todo, tan sensible.

Y se está convirtiendo en un gran fotógrafo, con predilección por los primeros planos o detalles. Estas dos fotos son suyas, y ya voy a postear algunas más que me encantaron.

El 31, Mariano lo tuvo de asistente para el asado de campo...

y pasamos otra noche mágica, rodeados de la nada... pero qué falta de respeto es decirle "la nada" a semejante paisaje de la naturaleza... me retracto!

Un día tomamos el camino antiguo de tierra hacia La Cumbrecita (y aunque estas fotos están sacadas con mi celu, se la recontra bancan, no?)

Nos dijeron que el camino sólo podía hacerse con vehículos 4x4 pero el Symbol la rockeó de lo lindo!

Adoro las Hortencias, y en La Cumbrecita pareciera que crecen con yuyos!

Camino de raíces hacias la cascada (foto de Vero)

Salimos a comer, pero también cocinamos sano y rico en la cabaña.

Hora de la siesta en el río de Santa Rosa...

Los picnics despertaron la pasíon de Amadeo por los sanguchitos! Y hace poco vi este video que resume su amor, jaja

Mateo se animó al cannopy, y nuestro ninja lo alentaba gritando "dále, nene, dále!"

Y cuando llegó el turno de Vero, los instructores se peleaban por ponerle y sacarle los arneses! jaja

Tarde de río y sonrisas de chocolate!

Haciendo volar al niño ninja y mareando al o a la pobre que viene en camino, y que ya es a prueba de todo! Casi, casi vamos a escalar el cerro Champaquí, pero Vero y Mariano tuvieron que convencerme de que cambiemos de planes... es que me olvido de que estoy embarazada y quiero hacer todo!

Y más pruebas de escritura con luz a la noche

Quise escribir una protesta contra los kayaks en las playas públicas, y la s me quedó al revés, tal vez como esa gente que quiere ir contra la naturaleza de las cosas... también en coproducción con Mateo hicimos una cara.

Y el último día, jugamos al "Twister" y nuestro ninja se hizo fan de ayudarnos a perder el equilibrio a risotadas! Este comienzo del 2013, es la apertura de un año que espero sigo así, con momentos de mucha alegría, mucha naturaleza y gente con corazón bueno y alegre que nos acompañe en esta aventura de ser papás por segunda vez. El año pasado fue tan lleno de tantas cosas inesperadas y maravillosas (cuántas veces usé el adjetivo "mágico" en los posts del 2012?) que a este año no le pido que lo supere, ni siquiera que lo iguale... le pido que nos de la oportunidad de seguir estando juntos, de tener salud y trabajo, y del resto, ya sé muy bien que al resto lo ponemos nosotros.

Fotos Gaby Morales, Mariano Nesi, Verónica Pichetto y Mateo Lorizzo