Primero, lo primero: Un retrato de mis hijos, una vez por semana
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mini Pocoyó! |
El sábado, gracias a mi cuñado y a mi hermana, que cuidaron a los pequeños ninjas, pude ir al masajista... es posible estar tan contracturada?
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Y después, almorzamos con los abuelos... a alguien que no quiero nombrar lo están malcriando mucho!!! |
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Este invierno-primavera, adonde quiera que vamos, el nebulizador viene con nosotros. Suerte que a Amadeo le hace el aguante su amigo fiel... |
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Y como en el jardín están empezando a trabajar sobre el vivero y las plantas, llevamos a Amadeo al vivero de Schoenstatt, un santuario y convento en Florencio Varela que tiene un parque inmenso y bellísimo. Está abierto a todo el público, no hace falta ser religiosos, así que fuimos antes de que empezara a llover... |
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Como siempre que salimos y encontramos chicos, Amadeo se les pega! Me gusta que sea un poco cara dura como yo! |
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Compramos algunas plantas, a ver si podemos hacer llegar la primavera a esta casa de una buena vez! |
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En el parque siempre hay gente caminando, gente leyendo, chicos estudiando o simplemente grupos de gente haciendo picnic... esperen, alguien dijo picnic? Me tiemblan las manos de abstinencia! Necesito un día de sol para hacer un picnic ya!!! |
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Encontramos una puertita en el tronco de un árbol: golpeamos, pero no salió nadie, buuuuu... |
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Ya en casa, mientras llovía, miramos las charlas TED en vivo y me lucí con unos hotcakes! |
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Pero el domingo, otros se lucieron con sus platos: Amadeo, con chipitas caseras! |
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Obviamente, las hizo a su estilo: Chipitas Pixar! |
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Pero al mediodía, fue Mariano quien se lució con sus pizzas semi-caseras, jaja! |
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Nuestros invitados, chochos y yo... también!!! Creo que me comí casi una pizza entera yo sola: cada vez que le doy la teta a Gaspar, me siento hambrienta como un león!!! |
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Bueno, a la noche, recuperé la corona de la cocina: una rabas no se le niegan a nadie, y menos en un domingo nublado, no? |
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A veces nos cuesta trabajo que Amadeo como bien, pero cuando el menú le gusta se come tres platos... pillín! |
Y antes de dormir, leímos nuestro cuento favorito... si, lo logré, se recontra enganchó con la vida de Jacques Cousteau... será que una soñadora puede enseñarle a sus hijos a ser más soñadores que ella y con un poco de suerte, hacer sus sueños realidad? Estas charlas, ya más cerca de quedarnos dormidos que despiertos, las voy a atesorar por siempre en mi corazón. Se están convirtiendo rápidamente en mi parte favorita del día. Gracias, por "querer charlar" todo el tiempo conmigo, mi niño-pez...
Fotos, gif y video Gaby Morales