Las casas están vivas. Les damos vida quienes vivimos en ellas y todos los objetos que elegimos para rodearnos todos los días, especialmente aquellos que necesitamos a nuestro alrededor por su belleza, su excentricidad, o por lo que signignificó su búsqueda o su hallazgo, o tal vez porque pertenecen a una colección cercana a nuestro corazón o son un vínculo directo a un recuerdo... quizás simplemente porque son especiales para nosotros aunque nadie más lo note. Me gusta observar los objetos que la gente elige para decorar sus casas porque hablan de sus dueños mejor que cualquier discurso (y hasta a veces, hablan mal!).
Para inaugurar esta serie de objetos de personas que quiero, elegí casi sin darme cuenta a dos personas("jes" jaja) recurrentes en el blog porque así de recurrentes son en mi vida: Nano y Miguel. No voy a dar detalles sobre su hogar ni la disposición o historia de cada objeto , porque muchas veces no lo sé y porque me gustaría que quienes no los conocen pinten su propio cuadro a partir de lo que ven, armen su propia historia. Porque un objeto aislado que nos seduce a llevarlo a casa nos invita a "vivir nuestra propia aventura"con él, no?
Pobrecito, Jade no es un objeto pero es tan lindo que no puede evitar ser también decorativo!
Fotos Gaby Morales
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