Nuestro finde de panzas, peloteros y museos (según mi cámara)

Fué un finde caluroso, pero aparentemente es de los últimos (no jueguen con mis sentimientos y mis sensaciones térmicas, meteorólogos!). Así que pasamos el sábado en nuestra pile con mis viejos, y estuve así de cerca de hacer un bizcochuelo pero mi mamá trajo tanta comida que desistí; a la noche fuimos a cenar con la hermana de Mariano y tal vez la próxima vez que le saque una foto, ya va a tener a su bebito en brazos. Si bien ya está casi en fecha... nuestras panzas no son taaan diferentes! Ay, qué será de mi en el octavo mes de embarazo!; el domingo nos levantamos con ganas de pasear, así que nos fuimos a la costanera a comer unas bondiolas (por si la nutricionista de Mariano lee esto, sabé que la comió al plato, María José!) y aprovechar los peloteros y las plazas (menos mal que llevamos ropa para cambiar al ninja porque el calor y la arena son una combinación infernal!). Amadeo la pasó de pelos escalando un tobogán inflable gigante, y nosotros le gritábamos "Muy bien, ya casi llegaste, no tengas miedo!" creo que diciéndolo más para nosotros que para él... y como logramos cansarlo bastante, la segunda parte del paseo fue para nosotros: fuimos al Malba a ver una muestra fantástica del colombiano Oscar Muñoz, que fusiona fotografía, video, dibujo y escultura... de verdad lo logra y el resultado es impresionante, ya voy a contar más sobre esto porque hacía mucho que una exposición no me sorprendía tan gratamente. Eso si, termina este domingo, así que si alguien está interesado/a, tiene que apurarse. Y Amadeo se portó tan bien en el museo que lo premiamos con un mini frappuchino de frutilla...y aprendimos que si planificamos actividades divertidas para él, después podemos hacer algo para nosotros (y en realidad la pasamos bien todos!).

Fotos Gaby morales y Mariano nesi